Además de preciosas playas en la Costa Brava podemos encontrar preciosas fincas rústicas para inversión o residencia. Si se trata de una masía, la compra se convierte en una inversión inmobiliaria única, ya que además de la belleza de su construcción, suele ir acompañada de extensiones de terreno rústico, como tierras de cultivo o bosques. Una inversión ideal para ver crecer tu proyecto de una manera sostenible en un entorno único.